En la reunión realizada en las Montañas Rocosas se elaboró un manifiesto con los 12 principios ágiles, es decir, se estipularon las reglas a las que se deben adecuar las empresas. En primer lugar, se estableció que la prioridad es mantener la satisfacción del cliente generando productos o servicios acordes a sus necesidades. El segundo principio, indica que siempre debemos estar listos para afrontar los cambios del mercado. De igual modo, el tercer principio menciona que se debe entregar el trabajo con la mayor frecuencia posible. Asimismo, el cuarto punto determina que las empresas deben mantener una comunicación constante con los desarrolladores para que éstos puedan cumplir eficazmente con los requerimientos que se les soliciten.
Aunado a esto, el quinto principio enfatiza que los proyectos se deben construir alrededor de individuos motivados, los desarrolladores no son una fábrica de software. El sexto punto, menciona que se deben crear métodos más eficaces que propicien la comunicación. El séptimo principio, dice que el software debe realizarse bajo las necesidades específicas del cliente. En octavo lugar, se subraya la importancia de contar con procesos ágiles para lograr un desarrollo sustentable. Además, el noveno principio expresa que los técnicos deben contar con las herramientas necesarias a fin de mejorar la agilidad.
El décimo punto, consiste en hacer que todos los procesos sean simples. Dentro del mismo ámbito, el onceavo principio estipula que las empresas deben contar con equipos auto-organizados, que tengan la libertad de tomar las decisiones pertinentes para llevar a cabo sus actividades. Por último, doceavo principio señala que debemos ser flexibles con las reglas para, poco a poco, ir definiendo cómo vamos a poder ser más efectivos.